Reseña | Venom: Carnage Liberado es tanto una película de superhéroes como una comedia romántica. No bromeo. Es una historia genuina de una pareja que está en problemas y tiene que poner a un lado sus diferencias por el bien de la humanidad.
El chiste es que esa pareja es Eddie Brock y el alien con quien tiene que convivir, Venom. Y ahí nace una bonita historia de aceptación, de amistad y hasta de amor. Y así suene absurdo, la película lo sabe, y no le importa, y por eso funciona.
Es ridícula, entretenida, con acción, con chistes y de pronto demasiado CGI para mi gusto, pero con un poco más de 90 minutos de duración, Venom: Let There Be Carnage se mueve a toda y pasa volando.
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Si te gustó la primera, ésta claramente es para ti. En esta ocasión Eddie sigue teniendo problemas para coexistir con Venom, pero un asesino serial llamado Cletus Kasady quien coexiste con otro alien llamado Carnage, traerá terror a la ciudad y Eddie y Venom deben detenerlo.
La trama es bastante simple, algunos podrán decir que hasta aburrida, pero Tom Hardy se nota se está divirtiendo y se mete de lleno en la ridiculez del asunto para generar risas. Esa es la clave de la película, esa dinámica y bromance entre Eddie y Venom.
Si buscas diversión, aquí la tendrás. Venom: Carnage Liberado es mejor que la primera, tiene más comedia, acción, una escena post-créditos que no se pueden perder y en general, es una secuela que cumple y seguro dejará a los fans de la primera felices.
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Escribo sobre lo que amo, el cine y la televisión. Recomiendo qué ver para que tu no pierdas tiempo ojeando posters en la tele. Con los Ojos Cuadrados desde pequeño.
